Seguidores


domingo, 4 de diciembre de 2011

Abrazame fuerte, no me sueltes.

Y me siento aquí, en mi silla, escribiendo y mirando cómo se cuela la luz de la noche por la claraboya del tejado, y sólo pienso en ti, en lo lejos que estás, y en cuánto te echo de menos. Cuánto duele echar tanto de menos a alguien,que parece que el corazón se te va a desangrar en cualquier momento. Esa sensación de tenerte a setecientos kilómetros, esas ganas de abrazarte, besarte, y que desaparezca el resto del mundo. De que me mires de esa forma que sólo tú sabes, de que me sonrías y eclipses a la luna, de que me hagas cosquillas, y te encante hacerme rabiar. Y cuánto duele saber que hay momentos que no se volverán a repetir, que no estaremos nunca más como antaño, y que tendré que pasarme los días echándote de menos, sin quererlo, que nos crucemos por la calle, y ni me saludes, y de que duela hasta el mínimo latido de mi corazón. ¿Por qué siempre se repiten las mismas historias en mi vida? ¿Por qué no puede ser todo normal? Siempre que las cosas van bien, hay algo que las jode, y siempre es así. Por una vez, sólo una, me gustaría querer y que me quieran del mismo modo.

domingo, 27 de noviembre de 2011

Hablando de amar.

Y de pronto meto la mano en el bolsillo trasero de mis vaqueros y descubro los pequeños granos de arena que allí han permanecido desde el día en que jugamos en la playa, jugamos a ser uno, a ser niños, a perseguirnos y reír, del beso después, con tu sonrisa frente a mi, con tus ojos mirándome, y con tus labios sobre los míos, me dijiste: "Eres especial, eres única". Y yo, como una idiota, te creí, sin dudar de ti, dejándome llevar por tus palabras y tus caricias en mi espalda. Porque, ¿Sabes? Te quiero, aunque no quieras creerlo, te quiero, y suena a demasiado, suena grande, profundo y da miedo, pero te quiero, y eso es algo que no puedo evitar. Un día te dije que me da miedo el amor, querer a alguien tanto que duela, pero aquí estoy, echándote de menos cada instante que estamos separados, con dolor en el corazón y lágrimas en los ojos. Y todo, porque te quiero, y para ti sólo soy una guarra más, un rollo de una noche, algo sin importancia, después de todo, ¿Sabes cuanto duele saber que no eres importante para la persona a la que quieres? Mucho, duele mucho.

sábado, 5 de noviembre de 2011

Circulo vicioso.

Un choque, una mirada, un saludo, una conversación, un beso en la mejilla, un abrazo, un agradecimiento, un problema,  una lágrima, un consejo, una caricia, un instante, un pico, una sonrisa, un beso, un "te quiero", un roce, un orgasmo, un "te amo", una discusión, un llanto, un grito, algo que se rompe. Extraños, otra vez.

Y aunque ahora somos como extraños, yo jamás te olvidaré.

Y entonces, de pronto, te das cuenta de que hay alguien en quien no habías reparado hasta entonces, ves que está ahí, hablandote, apoyandote, queriendote...y para cuando te das cuenta, llegas tarde, y él ya no está, al menos no como antes, lo sientes lejos, y cada vez se aleja más y más. Y te callas, y le ayudas, y le aconsejas, por no hablar y cagarla, por no decir las cosas como son, por no querer admitir la cruda realidad. Que le quieres, y que te encantaría verle, abrazarle, y marcharte al fin del mundo con él. Que bajarías la luna sólo para verle sonreír, que comprarías un mundo sólo para los dos, que harías cualquier cosa por él. Pero está tan lejos, que te duele con sólo pensar en lo imposible, que no sabes qué hacer para acercarte más, que la vida no es fácil, pero hay que saber vivirla. Te quiero, dificil, cierto, siempre, todo, amor.

domingo, 11 de septiembre de 2011

Nunca he sentido nada como esto en mi vida.

Cuando lo ves todo perdido, como si no fueras a salir del agujero, cuando peor estás, cuando no ves la salida, y el futuro es negro. Entonces, aparece él, montado en su caballo blanco, vestido de azul, y te tiende su mano para rescatarte de ese infierno que estás viviendo. Quizá no sea para besarte, quizá solo quiere que seais amigos, pero él está ahí, para ayudarte, y para sacarte esa sonrisa día a día, para gastarte bromas tontas, y hacerte reír, para decirte: Yo te quiero. Aunque sea sólo como amigos, aunque sea eso, pero te ha tendido su mano, y te ha ayudado a seguir adelante. Y le miras, y te mueres de ganas de besarle, sí, pero no puedes, no te atreves, no quieres estropearlo, y paciente, esperas desde una esquina a que se de cuenta de lo que pasa por tu cabeza, de que no puedes esperar más, no más. Que le quieres, que le deseas, que estas ahí.

miércoles, 17 de agosto de 2011

Son sus ojos, será su forma de mirar.

A muchos nos gustaría conocer la respuesta a por que nos aferramos al pasado con tantisima fuerza, si en realidad lo que queremos es vivir el presente. Probablemente sea porque nos da pavor el futuro, el no saber que sera de nosotros, si encontraremos a esa persona al fin, si seremos realmente felices, si nos espera algo prospero... Nos da miedo lanzarnos al vacio por alguien o algo, nos da miedo enamorarnos y sufrir, y nos da miedo decir “Te quiero”. Pero, en realidad, la vida es eso, riesgo. Momentos de felicidad y de dolor, a veces las estupidas dudas nos impiden arriesgarnos y tomar una decision, pero, como habreis escuchado muchas veces, quien no arriesga no gana y creedme, es mucho mejor arriesgar y perder que no hacerlo y no saber que podria pasar.

sábado, 9 de julio de 2011

Oh, it's what you do to me.

- De todas las personas del mundo tenía que pillarme por un imbécil...

+ Vamos, ¿En serio sigues pensando que eliges de quién te enamoras? Tu cabeza toma todas las decisiones posibles, te guía hacia donde quieres ir, hace lo que deseas, y rechaza lo que no quieres hacer, pero el amor, el amor es el único sentimiento que va por libre, que se guía tan solo del corazón, en el que tu cabeza no tiene voz ni voto. Te enamoras de alguien en concreto, tanto si quieres como si no, da igual si es un absoluto imbécil, o el tío más perfecto del mundo. Si tu corazón dice que quiere que te enamores de alguien, aunque sea el momento más inoportuno, lo haces, y no puedes remediarlo. A veces es un simple capricho que se pasa al cabo de poco tiempo, pero otras es un amor verdadero, y resistente, que puede durar semanas, meses o incluso años, y no siempre es correspondido. El corazón es muy traicionero, de las millones de personas que hay en el mundo, puede fijarse en el único de quien no querrías enamorarte, pero en ese momento, no existe nadie más, es él, él y sólo él. Pero no te preocupes, el corazón no siempre se equivoca, también puede acertar, si encuentra a la persona adecuada, la persona perfecta para ti, te hará sentir la chica más afortunada del mundo, y algún día la encontrará, tan sólo tienes que tener paciencia y esperar al que pueda sanar del todo tu corazón roto.

- ¿Lo dices en serio?

+ Completamente.

miércoles, 6 de julio de 2011

I've just lost control.

El amor es ciego. Cuántas veces habré escuchado esta frase, de boca de mil personas diferentes, con vidas opuestas, con motivaciones distintas, con experiencias pasadas. Son personas que vienen de mundos diferentes, sí, pero todos coinciden es esa frase, eso tiene que significar algo, digo yo, o quizá sólo quieren justificar que perdieron la cabeza por una persona y no pensaron en nada más. Intento aferrarme a esa posibilidad, pero no parece muy fiable, yo también he perdido la cabeza por alguien y he hecho el idiota por él, así que es más lógico pensar que es cierto que el amor es ciego, que cuando llega te arrastra en su mar de deseo, de querer más. El amor nos hechiza con su sabor dulce, tenemos curiosidad por lo desconocido, y a pesar de tener experiencias pasadas, que nos dejaron un sabor amargo, nos tiramos a la piscina de nuevo, después de haber dicho: "Nunca más". Lo volvemos a hacer, volvemos a caer, volvemos a darnos de cabeza con la realidad, y volvemos a sufrir de nuevo. A pesar de todo el dolor que supone un corazón roto, en mi opinión, la vida sin amor no valdría la pena, es el amor el que nos motiva, nos deprime, nos hace sonreír, o nos hace llorar, en definitiva, es el amor el que rige nuestra vida. Y seguro que tropezarás con la misma piedra un millón de veces, y caerás, pero te volverás a levantar, y seguro que te confundes de dirección otras dos mil veces, y seguro que te pierdes, pero volverás a encontrar la dirección, porque al final del camino te espera esa persona que te hará feliz por el resto de tus días.


lunes, 4 de julio de 2011

Just do it.

Empieza julio, esa época calurosa en la que todo el mundo busca desesperadamente las fiestas, el relax, el vodka, y los amores de verano. Amores teñidos de granitos de arena y sal de mar, que acompañan puestas de sol y un cielo nocturno, lleno de besos regalados y esperanzas, llenos de felicidad. Momentos especiales, con más o menos sinceridad, en los que exploras lugares desconocidos hasta entonces, en los que te atreves a lanzarte a la piscina, ayudado por unas gotitas de alcohol, esos días en los que todo te da igual, en los que lo único importante es disfrutar del momento, de tus manos en su espalda, de sus manos rodeando tu cintura, de tu pelo lleno de arena, y tu sonrisa llena de amor. Falso, o no, a veces sientes verdadero amor por esa persona, pero los amores de verano son casi siempre amores pasajeros, que se apagan cuando llegan las clases, los exámenes y el estrés de nuevo. Aún así, como he dicho antes, lo importante es vivir el momento, y no ser dueño de tus propios pensamientos, hacer lo que quieres en ese momento, sin pensar en lo que pasará mañana, siendo presa del deseo y de la fuerza que te arrastra en ese momento. Robando algunos besos, y tomando prestados otros, contando estrellas a medianoche, y de cara al mar, rodeados por la suave arena que envuelve vuestros cuerpos, sintiendote libre de ser quien eres, sin mentiras, feliz, aunque sean sólo unos segundos, respirar su aire, y besar, abrazar, querer.

lunes, 30 de mayo de 2011

No todo va a ser sonreír siempre.

The touch of your hand says you'll catch me whenever I fall. Yo también creía en esa frase, es lo que pasa cuando estás enamorada, cuando sientes que otra persona también lo está. Es lo que sucede cuando ves esa luz en sus ojos que también está en los tuyos. Cuando te dice que te quiere, cuando te lo demuestra, y le crees. Pero de pronto algo hace que toda esa magia se rompa, y junto a ella se rompe también algo en tu interior. Y ese amor es tan fuerte que el dolor es duradero, un mes, dos, tres, seis...y parece que nunca va a dejar de dolerte. Por todos los momentos, por cada segundo, algo que te hace sentirte peor. Cuando le ves, y parece no verte, te ignora, sientes que el mundo se te viene encima. Porque parece que no va a haber ningún otro que te haga sentir así, completa, feliz, querida. Esos momentos en los que deseas con toda tu alma que el tiempo se detenga, que esa felicidad sea eterna, que no acabe nunca. Pero el tiempo sigue su curso, y de pronto ves ese final que tanto temías. Es un final lleno de lágrimas, de dolor, de ausencia de aquel amor que tan bien te hizo sentir. Y cambias el te quiero por un te odio. Ese calor que sólo él te daba, ya no está, y sólo sientes el frío de la noche. Intentando llenar el vacío a base de alcohol, aunque al final siempre sea peor. Intentas aferrarte a una última esperanza con todas tus fuerzas, sonreirle cuando pasa por delante tuyo, no derrumbarte cuando está presente, reunir las fuerzas necesarias para que vea que eres feliz, aunque en realidad no lo seas. Te echo de menos.

sábado, 28 de mayo de 2011

Porque cada día es diferente, contigo.

Gracias por existir. Como si el mundo fuera un poco menos malo porque tú estás en él, como si toda mi vida fuera más fácil porque te tengo, y mis problemas fueran un poco mejores porque sé que tú estarás ahí para ayudarme a superarlos. Porque cada día es diferente, especial, fantástico, porque tú vives, porque te tengo, porque me quieres. Porque ese sentimiento, saber que alguien te quiere de verdad, es perfecto. Cada hoja del calendario, cada día que pasa, a tu lado es mejor que el anterior. Por una vez puedo decir te amo, sin miedo, sin dudas, sin angustia. Te amo, te amo, te amo.

sábado, 21 de mayo de 2011

Guess.

¿Sabes de qué estoy harta? De arrastrarme por ti y que pases de mi. De hacer lo imposible por que seamos amigos y que me ignores. De seguirte hasta el fin del mundo y que no lo aprecies. De buscarte y no encontrarte. De esperarte y que no vengas. De quererte y que me odies. De pensar en ti y que te olvides de que existo. De querer estar contigo y que huyas de mi. De releer tus mensajes y que tu hayas borrado los míos. De retenerte en mi memoria y que tu me hayas borrado. De querer odiarte y no poder. De querer que estes conmigo y que quieras estar lejos. De buscar algo que me una a ti y que te separes de mi. De hablar de ti y que no recuerdes quién soy. De decir tu nombre y que no te acuerdes del mio. De soñar contigo y que no me quieras ni en sueños. De recordar nuestros besos y que tú los hayas olvidado. De amarte incondicionalmente y que tú me quieras perder de vista. De ti, estoy harta de ti.

jueves, 12 de mayo de 2011

Deja a un lado la cobardía, comete el error.

Pretende impresionarme con cada pequeña hazaña, hacerme reir con una sola frase, convertirme en princesa, hacerme feliz con una sola sonrisa, cogerme de la mano, que espere con impaciencia el momento de nuestro encuentro, que piense en ti día y noche, que escuche tu música, que hable de ti a mis amigas, que diga que esto es mejor que cualquier película, que me gusten las cosas ridículas, que esté perfectamente sin saber por qué, que tenga ganas de gritarle al mundo, que no pueda sacarte de mi cabeza, que diga él cuando me refiero a ti, que quiera ser tuya y solo tuya, y que quiera que seas mío y solo mío, que no me de miedo perder el rumbo si es contigo, que quiera pasar las horas a tu lado, que escriba tu nombre en todas partes, que me atreva a decir te quiero. Que sea capaz de querer sin miedo.

martes, 10 de mayo de 2011

Y este amor, que ya no entiende de razones.

Cada vez que me da por escribir, escribo sobre ti. Se puede decir que soy egocéntrica, pero de una manera un poco diferente al resto, el centro no soy yo, eres tú. Porque no hablo de mi día sí y día también, hablo de ti. Porque no pienso que soy lo más importante del universo, pienso que tú lo eres. Y porque no me paso media vida mirando mis virtudes y mis defectos, sino los tuyos. ¿Te parece bonito? Me has puesto la vida patas arriba. Cada vez que me acuerdo de ti, no sé si sonreir o echarme a llorar. Y no sabes cuántas veces he pensado que soy imbécil por dejarte escapar, por tener miedo, por mis estúpidas dudas, por el temor de enamorarme, de perderme y de salir malparada. ¿Y? Ya ves, me he enamorado, me he perdido y ahora estoy demasiado jodida como para pensar en otra cosa que no seas tú. Es muy fácil decir que debo olvidarte, pero mucho más complicado es ponerlo en práctica. Será porque cada vez que lo intento, aparece algo que me recuerda a ti, una canción, una frase, un gesto, una sonrisa...Mucha gente me ha dicho que si estamos hechos para estar juntos, nuestros caminos volverán a unirse, y miraremos de nuevo el mismo futuro. Pero no creo que eso sea posible si tú intentas por todos los medios que no nos crucemos ni en sueños. ¿Pretendías hacerme daño? Pues lo has conseguido, aunque probablemente soy demasiado orgullosa como para admitir algo así. Y como dice esa canción: Y es que ya no hay lágrimas que valgan...No, no quiero llorar más por ti, he decidido que no será derramada ni una sola lágrima más por este amor maldito. Porque aunque te echo de menos cada segundo que pasa, no pienso admitirlo, ni quiero que lo sepas, no quiero nada, sólo que algún día seas capaz de tragarte tu orgullo y de hablarme de nuevo. Hasta entonces, adiós.

lunes, 9 de mayo de 2011

Te queda pequeña la frase te quiero.

El amor no surge poco a poco, llega a lo bestia y te arrasa, como un tsunami. Pero muchas veces no te das cuenta de que ha llegado, no notas su presencia, se pasea a tu lado con su molesto zumbido, y tú intentas quitartelo de encima, restarle importancia a lo que sientes en esos momentos. Pretendes quedarte como estás, con la amistad. Pero un día estalla, porque tiene que pasar, y sientes que te duele el pecho porque no cabe tanto amor dentro de él. Su simple presencia, el olor de su perfume, el sonido de su voz, su sonrisa, la forma en la que se mete contigo, cuando te dice "Te quiero" y cuando os peleais. En esos instantes en los que deseas con toda tu alma que el tiempo se detenga, y que esos momentos de felicidad sean eternos. Pero se acaban, y entonces llega la típica pregunta: Todo tiene un principio ¿Pero es necesario que tenga un final? Al parecer sí. Porque descubres que no es como tú pensabas, o que ha cambiado demasiado. Que se ha vuelto un cobarde, un hipócrita y un borde, y aún así le sigues queriendo. Estúpida. Mucho, pero ¿Qué puedes hacer? ¿Qué se hace en estos casos? Cuando alguien te ha tratado como una princesa durante tantísimo tiempo, cuando alguien te ha dicho cosas tan preciosas que te ha hecho llorar, cuando alguien te ha hecho sonreir incluso en los momentos más oscuros, cuando una sola persona ha sido capaz de hacer que olvides al amor de tu vida diciendote que tus ojos son como el atardecer más romántico, que te quiere llevar a Roma, y que quiere volar contigo a cualquier lugar. Cuando una persona ha sido capaz de sacarte del abismo en el que vivías antes de conocerle, ¿Qué se puede hacer cuando, sin previo aviso, esa persona desaparece? Sin darte un motivo, sin decirte nada, simplemente, que no dejes de sonreír. Sus últimas palabras, y de nuevo al abismo. Esa misma persona que te sacó de él, es la que ahora ha vuelto a hundirte de nuevo. ¿Qué se supone que debes hacer en estos casos? Esperar. Sí, ¿Y mientras? Morir cada vez que lo ves ahí, morir cuando ves que sonríe, que es feliz, que ya no existes para él, morir porque te sientes insignificante en su vida, y él es tu vida. Que todos esos besos, esos abrazos, esas promesas, esos halagos, esos momentos, ya no son nada, y que todas las palabras que te ha dicho, se las llevó el viento, y no volverás a escucharlas de sus labios, jamás volverás a escuchar un "Te quiero".

Quizás, tal vez.

Si lloramos, es porque ha pasado algo. Si reímos, es porque tenemos motivos. Si suspendemos, es porque no hemos estudiado. Si estamos cansados, es porque no hemos dormido. Si sonreímos, es porque estamos contentos. Si estamos pensativos, es porque algo nos preocupa. Si estamos eufóricos, es porque somos felices. Si tenemos ese brillo especial en los ojos, es porque estamos enamorados. Tópicos. Todo el mundo piensa que todo sucede por una razón, que no podemos reír, llorar o ser felices sin un motivo, que todo lo que nos sucede es porque algo ocurre. No siempre es así, lo digo por experiencia propia. Yo río porque sí, lloro sin motivo, sonrío porque me apetece, estoy eufórica sin ninguna razón, estoy cansada aún habiendo dormido horas, estoy pensativa sin tener ningún tipo de problema. Y sobre todo, no me brillan los ojos, y siento eso que algunos llaman "amor". Quizá soy la excepción que confirma la regla, pero siento que no soy la única a la que le suceden cosas sin razón.

Tú.

Eres un idiota, un imbécil, un cabrón, un manipulador, un cínico, un gilipollas, un hipócrita, un falso, un anormal, un mentiroso, un putón, un cerdo, un bobo, un plasta, un acosador, un desinteresado, un insensible, un lerdo, un ignorante, un maricón, un estúpido, un cobarde, una mala persona, un borde, un capullo, un cretino, un insensato. Sí, eres todo esto, pero ¿Sabes qué es lo peor? Te quiero.

sábado, 7 de mayo de 2011

Goldie.



Ya sé que te habré dicho esto muchas veces, que suena típico, o que parece que lo digo sin sentirlo. Pero realmente es lo que pienso. Tú, tú eres esa personita que me ha escuchado TODAS y cada una de mis tonterías. Tú, tú eres la que estaba ahí día sí y día también apoyandome con mis locuras. Tú, tú eres aquella que desde hace varios años no me ha dejado NUNCA sola. Tú, tú eres la niña más bonita que he conocido. Tú, tú eres esa persona increible que a pesar de todo siempre está ahí, y sé que siempre lo estarás. Haciendo el bobo conmigo, riendo conmigo, llorando conmigo, hablando durante horas, compartiendo una vida, aunque estemos a un montón de kilómetros de distancia. Sé que cuando esté mal te tendré a ti, y espero que tú sepas que me tienes aquí para todo lo que necesites y más. Porque más que una amiga, eres una hermana. Y la palabra te quiero, se te queda pequeña. Te amo.

El blog de la guapisela esta --> http://misunicosypropiospensamientos.blogspot.com/

Pasaros, en serio, merece la pena :)

viernes, 6 de mayo de 2011

Amor-Odio.

Cómo de pronto, casi sin que sea perceptible, se pasa del Te amo al Te odio. Los extremos opuestos, pero qué facil es viajar a través de ellos en pocos días, ¿Cómo una persona puede pasar de amar a odiar? Fácil. Realmente no amaba tanto como decía, ¿O sí? No lo sé. Nunca he pasado de amar a odiar, ni de odiar a amar, simplemente, he amado y odiado a la vez, a la misma persona. ¿Dificil? Que va, seguro que la mayoría habeis pasado por eso. Sientes que amas tanto a una persona que darías todo por ella, pero a la vez te ha jodido tanto que le odias con todo tu ser. Y lloras, y esas lágrimas salen de dentro, del alma, del corazón. Son lágrimas de amor, lágrimas de dolor, lágrimas de sufrimiento, lágrimas de nostalgia, lágrimas de él. Y puedo pensar que algún día me amaste, pero todo este dolor no compensa por los momentos que hemos estado juntos, todo lo que sufro ahora...no quisiera haberte conocido. Te amé. Te amo. Te amaré. SIEMPRE.

jueves, 5 de mayo de 2011

Dos palabras, ocho letras, soy tuya.


Te necesito.

En este momento hay seis mil millones de personas en el mundo. Algunas corren asustadas. Otras vuelven a casa. Algunas dicen mentiras para llegar al final del día. Otras simplemente están enfrentándose a la verdad. Algunos son hombres malvados en guerra con los buenos. Y algunos son buenos, luchando con los malvados. Seis mil millones de personas en el mundo. Seis mil millones de almas. Y a veces… todo lo que necesitas es una.

No es que sea el alcohol la mejor medicina, pero ayuda a olvidar cuando no ves la salida.

Queremos lo que no podemos tener. Y cuando lo tenemos, lo rechazamos, porque pensamos que en realidad no lo necesitamos, no nos hace falta, no lo deseamos, no lo amamos. Y de pronto, se va. Se va y te das cuenta de que no puedes vivir sin ello, de que se ha ido y sientes unas tremendas ganas de llorar. Que echas de menos su conversación de cada día, que echas de menos que le preocupe cualquier tontería que te ha pasado, que echas de menos que se ría de tus chistes malos, que echas de menos que te diga "Te quiero". Echas de menos todo sobre él, y te maldices a ti misma por haberlo dejado escapar, pero ya no puedes echar el tiempo atrás. Y lo hecho, hecho está. Aún así no puedes evitar pensar que en un futuro volverás a dejar escapar oportunidades como esas, y volverás a llorar, y a pasarlo mal de nuevo. Volverás a echar de menos escucharlo de sus labios. Te quiero. Te quiero. Te quiero.

lunes, 25 de abril de 2011

Me cuesta respirar tu ausencia.

Siempre, vaya a donde vaya, haga lo que haga, escuche lo que escuche, pienso en ti. Generalmente se me pone una sonrisa idiota en los labios, que es rápidamente sustituida por una mueca de dolor. ¿Dolor? Sí, no hay otra definición para lo que siento. Como si cada bocanada de aire me costara un mundo, porque tú no estás para ayudarme a cogerla, porque tú no estás para ayudarme a respirar. Te echo de menos. A veces, camino por mi casa y siento que mi ropa huele a ti. Mis recuerdos vienen perfumados por tu olor, vienen acompañados siempre de tu sonrisa y de tus ojos. Cada vez que me acuerdo de tu risa me dan ganas de llorar, que absurdo, ¿No? Unos ríen, otros lloran. Y es siempre así. Mientras tú ríes y disfrutas de la vida como si yo no existiera, yo no hago más que pensar en ti, en todo lo que tiene que ver contigo, en los momentos pasados junto a ti. En nosotros. ¿Nosotros? ¿Qué nosotros? Yo únicamente veo un tú y un yo. Nuestro camino se ha bifurcado y cada uno debe seguir su vida, ¿No es así siempre? Y que me jodan si te quiero, ¿No? El amor es cosa de dos, si sólo una persona quiere a otra, sin recibir nada de ella, eso es amor no correspondido, y ese amor es amor sin derecho a exigir ningún trato de la otra persona. He intentado por todos los medios que nuestros caminos se volvieran a juntar, al menos en un camino de amisad, pero no he conseguido nada, ni siquiera ser amigos. Nada. ¿Cuantas veces me has dicho que me quieres? Incontables. Y de pronto, se acabó. No solamente no me quieres, sino que además no quieres saber nada más de mi, como auténticos extraños. Como si sólamente me conocieras de oír hablar de mi por ahí. Pero ambos sabemos que no es así. Nos conocemos, sí, y mucho además. Ha habido demasiados momentos, demasiados te quiero, demasiadas peleas y discusiones, demasiadas lágrimas derramadas. Y me he enterado de demasiadas cosas referentes a ti que preferiría no saber, demasiados secretos inconfesables. Y a pesar de todo, soy imbécil, y te sigo queriendo.

Pienso en ti día y noche y no sé cómo olvidarte.

Muchas veces he mandado a la mierda todo, muchas veces he dicho que no quería saber nada más de ti, un millón de veces he dicho que no volvería a pensar en ti. ¿El resultado? Nada. Sólo pienso en ti, día sí y día también. Desaparece de mi mente, por favor, no haces más que daño a tu paso. Lárgate.

domingo, 24 de abril de 2011

Dime una vez más que te gusto hasta enfadada.

Voy descubriendo poco a poco, que en esta vida no hace falta el dinero para conseguir la felicidad. Son los pequeños detalles los que te sacan una sonrisa cada día. Un pequeño gesto de alguien, una rosa, una carta, un mensaje...algo hecho con amor, que por pequeño que sea puede alegrarte el día más oscuro. Una simple palabra, dos, en realidad: Te quiero. Eso sí que te hace feliz realmente, aunque lo sepas, que te lo recuerde cada instante, que piense en ti, que quiera que lo sepas, que no le importe, que sea un pesado. Porque cuando no te lo recuerda, lo echas de menos, porque cuando te das cuenta de que no lo escucharás de nuevo de sus labios, sientes un enorme vacío, te falta una parte importante de tu día, te falta ese pequeño detalle, te falta aquello que antaño te hacía sonreir. Te falta él.

sábado, 23 de abril de 2011

¿Se puede multar un corazón por exceso de velocidad?

Extraña sensación. La recuerdo perfectamente. Con mi cabeza apoyada en tu hombro y tu cara a escasos centímetros de la mía. Sintiendo tu aliento. Respirando el mismo aire. De pronto, el tiempo se detuvo unos segundos, tus ojos castaños clavados en los míos, tus labios tentadores suplicando que te besara. Sólo unos pocos segundos, que a su vez parecían eternos, hasta que mi corazón comenzó a latir desbocado, al sentir el contacto de tus labios. Sin saber, sabiendo. Sin querer, queriendo. Perdiendome en tu dulce sabor, explorando rincones desconocidos. Abrazados, abrigados por la noche, por la luna, por el frío de enero. Tú. Yo. Dos almas que se fundían en la oscuridad, sintiendonos, saboreandonos, siendo los dos, uno solo. Amantes fugaces, prisioneros del deseo y del amor. Qué extraña sensación. Esa de quedarte sin aliento en un latido, y respirando entrecortadamente en el siguiente. Sin saber a dónde ir, guiada sólo por tu luz. Queriendo ser tuya, siempre tuya, sólo tuya. Y que tu fueras mío. Eternamente. Dejando que eligieras mi camino, y el tuyo, ambos por el mismo lugar, sin nadie que nos molestara, en nuestro rincón secreto. Donde aún se escuchan nuestras risas, nuestras peleas, nuestras reconciliaciones, nuestros besos. Donde aún quedan restos de ese amor que vivimos, de esos instantes, en los que quería que se detuviera el tiempo, cuando me susurrabas: Te quiero. Sin miedos. Sin preocupaciones. Sin problemas. Solos tú y yo.

Una sonrisa fingida y un: "Todo va bien".

Muchos dicen que soy hipersensible, sólo porque muestro mis sentimientos ante el mundo, porque lloro con las películas, porque me emociono con los pequeños detalles, porque sufro mucho por amor...yo también pienso a veces que soy un poco, demasiado, sensible, pero en ocasiones me planteo una duda, ¿Y si es el resto del mundo el que no se atreve a decir lo que siente? Porque, aunque parezca que no, la mayoría de la gente trata de ocultar sus emociones al resto del mundo, trata de poner una máscara ante el dolor y el sufrimiento, y de parecer potentes y fuertes. Pero creo que eso no es del todo correcto, ¿Que un día estoy triste y me apetece llorar? ¿Por qué voy a plantar una sonrisa y fingir que estoy bien? No le encuentro sentido, ¿Por qué tienen que pensar mal de mi por tener un mal día? No es justo. Todos tenemos un mal día, ¿No? Pues eso, que no hay que aparentar estar estupendamente cuando lo único que te apetece es encerrarte en tu cuarto a escuchar Secondhand Serenade y comer helado de chocolate. Simplemente, creo que debes mostrar al mundo cómo te sientes cada día.

Cuánta mentira, por dios.

¿La gente cambia con el tiempo o el tiempo muestra realmente cómo es cada uno? Es una frase muy típica, y seguro que todos la habréis escuchado más de una vez, o en su defecto, leído. Pero para mi, es una frase que conlleva mucha reflexión. ¿Quién no ha pensado alguna vez que alguien ha cambiado mucho en poco tiempo? Yo creo que la mayoría de la gente ha tenido alguna experiencia que le ha llevado a pensar esto. Y, os voy a ser sincera, yo creo que la gente no cambia con el tiempo, que alguien no puede cambiar en un año, de ser la persona más maravillosa del mundo a ser un auténtico cabrón/a. Simplemente, alguien no puede aparentar ser algo que no es, para impresionarte, para gustarte, para caerte bien...y al final siempre acaba sacando su verdadera personalidad a la luz, simplemente, porque ya no le interesa que le veas como algo que no es. Siempre jode darte cuenta de que alguien no es como tu creías, pero por esa misma razón hay que saber cómo es alguien realmente antes de depositar tu confianza en él. Recuerda, el tiempo muestra realmente cómo es cada uno.

martes, 12 de abril de 2011

Tres seis cinco.




Un año. Un año entero ha pasado. Con sus 365 días. Unos días buenos, otros no tantos. Un año extraño desde que nos conocimos. ¿Te acuerdas? Cuando me dijiste que te gustaba, y yo no sabía muy bien qué decir. No quería hacerte daño, pero no estaba segura de aquello. Ahora sí. Por primera vez desde aquel día sé que te quiero, y de verdad. Qué extraño todo. Hace un año exacto me fui a Estambul, y tú me echabas de menos. Este año me voy a Barcelona, y soy yo la que te echa de menos. Cómo cambian las cosas, ¿Verdad? 365 días, y tantas cosas que contar. Vaya año...sólo puedo decir una cosa después de todo. Ojalá pudiera echar el tiempo atrás y decirte: "Si, te quiero".

lunes, 11 de abril de 2011

Hace tiempo que me cuesta sonreír, gracias a ti.

Dime, ¿Por qué hace tiempo que no hago más que pensar en ti? Dime, ¿Te sentías tú así? Lo siento. Te lo he dicho un millón y medio de veces, lo sé, pero aún así quiero que sepas que lo siento muchísimo. A diferencia de ti, lo siento de verdad. Fue un error idiota, pero todos los cometemos, ¿No? Tenía miedo, dudas, no quería enamorarme. Entre otras cosas, porque ya lo estaba, de otro, sí, y dolía tanto...Por eso lo sentía, porque pensé que tú lo estabas pasando tan mal como yo. Tú, enamorado de mi. Yo, de otro. ¿Ahora? Yo, enamorada de ti. Tú, de otra. ¿Por qué es el amor tan injusto? No estaremos bien nunca. Gracias. Ya te lo dije una vez, y no me arrepiento, te las merecías. Ahora no. Pero entonces te merecías aquellas gracias, por todo lo que hiciste por mi, por aguantarme, apoyarme y tal vez, quererme un poco. De esas cosas me acuerdo cuando pienso en ti. También me acuerdo de los malos momentos, porque han sido muchos, de todo el dolor, de las dudas, de las lágrimas y de la angustia. Cuando no querías saber nada de mi, como ahora. ¿Hace cuánto que no hablamos? Semanas, tal vez meses. Y lo hecho tantísimo de menos. Te echo tantísimo de menos. ¿Recuerdas? A pesar de que estabas enamorado de mi, eramos amigos, hablabamos cada día. Y ahora que soy yo la que está enamorada, no hablamos, principalmente porque tú haces todo lo posible para evitar cualquier contacto. Y cuando no te queda más remedio que cruzarte conmigo, evitas el contacto visual y que nos acerquemos a más de dos metros. ¿Por qué? Hazme un favor, dime qué se supone que he hecho yo para que me hagas esto, para que me trates así. ¿Qué? Y si no tienes respuesta, y si no soy la única a la que tratas así. Planteatelo. Porque puede que pierdas lo que tienes si no aprendes a cuidarlo.

domingo, 10 de abril de 2011

Todo un mundo anclado ha sido todo un mar para perderte.

Jodido imbécil. Te quiero.

¿Cuántas veces me han preguntado ya si lo he olvidado? Millones. ¿Cómo es posible? Lo menos han pasado tres meses ya, y no consigo quitarme a ese gilipollas de la cabeza, jodidamente perfecto. Le odio. No, ¿Para qué engañarme a mi misma? ¿Para qué tratar de convencerme de que lo he aparcado fuera de mi mente? Llevo bastante tiempo levantandome cada mañana y pensando: "Le he olvidado". Mentira, si le hubiera olvidado no estaría constantemente pensando en él, no me jodería tanto escuchar esa canción. Maldita canción. Maldita Nerea. Tu mirada me hace grande. Nuestra canción. Jodido veintiséis de marzo, ¿Por qué? ¿Por qué tuve que conocerte? ¿Por qué tuviste que enamorarte de mi? Besarme. ¿Por qué tuve que enamorarme de ti? Tarde. Siempre tarde. Siempre perdiendo el tren. Las perfectas oportunidades que brinda la vida. "Me gusta otro". Y meses hablándote de él, y meses que me preguntabas, día sí y día también, si lo había olvidado. No. Siempre la misma respuesta. Te echo de menos. Cuando llevabamos dos días sin hablar. ¿Algo interesante hoy? Maite zaitut. Te quiero. Porque siempre estabas ahí, llorando conmigo, riendo conmigo. "No eres boba, sólo eres sensible". Dedicandome cada segundo libre de tu día. ¿Dónde quedaron los buenos ratos? ¿Todo el amor? ¡Puf! Desapareció. ¿Algo que añadir? ¡Ah, si! Te quiero.

jueves, 31 de marzo de 2011

Si buscas la perfección, no la encontrarás en mi.

Lo admito, soy muy cabezota, peleona, algo infantil, ingenua, desconfiada, impuntual, pelin cabrona, bastante picona, impulsiva, petarda, bastante imbécil, enamoradiza, sensible, romanticona, de las que tropiezan más de cien veces con la misma piedra, de esas que hacen una montaña de un grano de arena, despistada, incoherente, indecente, de aquellas que dicen todo lo que sienten, de las que meten la pata, que siempre hablan de más, esas que siempre dejan escapar oportunidades increibles, llorona, bipolar, motivada de la vida, loca, de las que se arrepienten de todo, que se quedan enganchadas en el pasado, que les cuesta levantarse si se caen, de aquellas que se ríen en los momentos más serios, que están mal sin motivo aparente, que se rayan muchisimo, que le dan vueltas a la cabeza, que piensan sin pensar, que sueñan despiertas, mal pensada, que dan demasiada importancia a las cosas, que pierden el rumbo, la que si tiene un mal día grita a todo el mundo. Tengo un millón de defectos, pero al menos sé quien soy, y que no pienso cambiar.

martes, 15 de marzo de 2011

Bruno Mars, LO AMO ♥


Hablemos de cosas de verdad, de lo mortal.

Cada segundo que paso pensando en él, es un segundo que pierdo sin hablar con él, sin estar con él, sin abrazarle, sin besarle. He perdido millones de segundos desde la última vez que le vi. Tantos segundos pensando que siempre recordaré cada minuto, cada instante que estuvo a mi lado, cada palabra, cada sonrisa, cada mirada. ¿Cuántos litros de lágrimas habré desperdiciado en él? No quiero ni pensarlo, son demasiados, no podría calcularlo ni aunque quisiera. Seguiré echandole de menos cada día, aún así, espero extrañarle cada vez menos. Me encantaría poder decir que él es la razón de mi sonrisa, pero estaría mintiendo, no existe sonrisa alguna cuando pienso en él, básicamente, son todo lágrimas. ¿Cuántas veces le he dicho que le odio? Muchisimas, ¿Es cierto? Tal vez. Aunque, tengo mi teoría sobre que el amor y el odio son incompatibles, últimamente me estoy demostrando que no es así, cada vez veo más clara la compatibilidad entre ambos. Le quiero, por cada momento especial, por cada palabra, cada canción, cada sonrisa, cada "Te quiero". Le odio, por haber desaparecido de repente de mi vida, por no quererme más, por las lágrimas, por el dolor, por el sufrimiento. Hace tiempo, le di las gracias por todo lo que había hecho por mi, la verdad es que se las merecía. Tantas cosas han cambiado desde entonces, en sólo tres meses, tantos cambios, tanto dolor. Gracias...por nada.

lunes, 14 de marzo de 2011

Resumes tu noria de vida en un sólo café.

Supongo que nunca se deja de sufrir cuando hablas de amor. Siempre conlleva algo malo, cuando estás con alguien, existen los celos, las dudas, las mentiras...pero cuando hablas de amor no correspondido, entonces sí que es sufrimiento de verdad, pensar cada día que él está con otra, que no echa de menos ni uno sólo de los momentos vividos, que probablemente esté viviendo momentos iguales, o mejores, con ella, por supuesto, con ella. ¿Cómo es posible que alguien se olvide de ti en tan poco tiempo? No hace ni un año que nos conocemos, y he tenido la historia más complicada de mi vida con él. Recuerdo cada broma que me gastaba, y cuando me decía que me quería para arreglar las cosas. Cuando discutíamos, y cuando me llevaba la contraria sólo por fastidiar. Cuando me pedía que confiara en él...¿Por qué tuve que confiar en él? Se lo dije, "Cuando confías en alguien, te jode la vida". Estaba en lo cierto, pero él me hizo callar con aquel beso, perderme en sus labios, respirar su aliento, una vez más. Releo cada uno de sus mensajes a medida que los voy borrando, todos acaban con un "Te quiero". Mensajes enviados durante este año, mensajes de ánimo, de esos que te sacan una sonrisa en cuanto los lees. Le echo tanto de menos, porque, sin querer, lo mejor de cada día era hablar con él, sin querer él me hacía sonreir, sin querer, me estaba enamorando, sin querer. Y no me daba cuenta de lo que perdía por no saber decirle la verdad, por no querer demostrarle que le quería, por no querer quererle. Pero, le quería tanto, le quiero tanto. Y me duele tanto que él no me querrá nunca más, que ni siquiera podemos ser amigos, que no eche de menos hablar conmigo, que no me eche de menos. Le contaba todo, sabía todo de mi, le interesaba cada pequeño detalle de mi día a día. Y ahora, saber qué poco he significado para él es lo peor de todo, pensé que me quería, qué equivocada estaba. Supongo que ahora me toca joderme a mí, tal vez algún día encuentre eso que algunos llaman felicidad, y será lejos de él.

Forever young.

Cuando eres pequeño, pierdes los juguetes, las pinturas, los muñecos...después tu madre te compra más, y al de unos días ya has olvidado lo que perdiste. A medida que te vas haciendo mayor, vas perdiendo cosas de mayor valor; la esperanza, la sonrisa, la confianza...pero esto no es algo que se pueda sustituir por algo igual o parecido, son cosas inmateriales, pero que tienen muchisimo más valor, que no las olvidas tan facilmente, que te duele cada día su ausencia. Hay momentos en los que me encantaría volver a la infancia, volver a aquella época feliz, en la que todo lo que perdía se podía recuperar y olvidar fácilmente, aquella época en la que la mayor preocupación era qué había para merendar, o qué dibujar en clase. Momentos en los que me encantaría vivir en el País de Nunca Jamás, con Peter Pan, y ser pequeña para siempre. Pero no se puede vivir así, hay que madurar e ir afrontando los retos y dificultades que la vida te presenta cada día, quizá con el tiempo puedas recuperar esas cosas que has perdido.

domingo, 13 de marzo de 2011

Everytime you're near I feel like I'm in heaven.

I don't wanna run away, baby you're the one I need tonight, no promises. Baby, now I need to hold you tight, I just wanna die in your arms, here tonight.

Perfectamente imperfecto.

Perfección. Gran palabra. Todos tenemos nuestro ideal perfecto, pero siempre es dificil ser el ideal de alguien. Aún así, cuando quieres a alguien, no tiene que ser perfecto. Cuando quieres a alguien de verdad, aprendes a ver la perfección en cada defecto. Aprendes a querer la imperfección de dicha persona. Nadie es perfecto, pero cuando de verdad te importa alguien, te parece la persona más perfecta del mundo. Así que, si alguien no sabe ver la perfección en ti, es que no es la persona adecuada, no sientas que no estás a su altura, y que podrías hacerlo mejor, porque no es así. Cada uno es como es, perfecto a su manera. No dejes que nadie te cambie, jamás.

I believe in memories.

Noche fría, en la oscuridad de mi habitación, con la música inundando cada rincón de la misma, cada palabra, cada nota, cada acorde...se clavan como mil puñales en mi corazón, todas y cada una de las canciones me recuerdan a él. Ese individuo, ese imbécil, ese imbécil, mi imbécil...cómo le echo de menos. ¿Cómo se puede echar tanto de menos a alguien que te ha jodido tanto? Porque cada momento que hemos vivido, cada abrazo, cada beso, cada sonrisa, cada palabra de apoyo, cada carcajada...Una lágrima silenciosa que se desliza por mi mejilla, una pequeña lágrima de amor. Él, ¿Qué estará haciendo en estos momentos? ¿Estará pensando en mi? No, que tontería, ¿Cómo va a estar pensando en mi? Estará pensando en ella, le estará diciendo cosas tan dulces como me decía a mi, le estará dedicando canciones de amor, recordandole lo bella que es, cuanto la quiere...¿Le querrá tanto como me quería a mi? Seguro...¿Alguna vez le he importado de verdad? Lo dudo. Quizá, en algún momento, hace tanto tiempo, tal vez entonces le importé algo. Pero ahora, que va, le importan tan poco mis sentimientos...ni siquiera me ha dado una oportunidad de demostrarle cuánto le echo de menos, de decirle que le quiero tantas veces como estrellas hay en el cielo, de besarle, de abrazarle, de tenerle...Como me gustaría retroceder al pasado, a aquel día, 26 de marzo, sí, que me diga otra vez que me quiere, que está enamorado de mis ojos y de mi sonrisa, de que me trate de nuevo como nadie me había tratado jamás, de que me haga sentir como una princesa otra vez, que le guste mi música y mi forma de reirme de todo, y de decirle que es idiota, y que le odio, porque cada "Te odio" significa "Te quiero". Imbécil, sí, así me siento ahora mismo, imbécil, por creer que iba a estar ahí esperandome siempre, ¿Cómo iba a estar esperandome? Seguramente se habrá dado cuenta de que no merezco la pena, de que no soy ni de lejos tan perfecta como él pensaba...cuantas cosas han cambiado en tan poco tiempo, él ha cambiado, ¿Cómo ha podido cambiar tanto en menos de un año? Pensaba que era una persona increible, pero me equivocaba, y aún así, dios, le quiero tanto...le quiero tanto que duele, duele pensar en él, duele saber que él está con otra, duele saber que no volverá a ser mio, duele.

Let's be crazy.

Let's be crazy.