Seguidores


jueves, 29 de noviembre de 2012

Esa sensación de vacío cuando se va.

A medida que me iba alejando, rezaba para que corrieses a detenerme, para que me volviese a agarrar fuerte, para que susurrase de nuevo que me quedase allí, con él, para siempre. Pero no lo hizo, no me siguió, no me pidió más tiempo, ni más abrazos, ni más besos, me dejó marchar, como un globo de helio que se pierde en la inmensidad del cielo azul. Y hace tiempo que mis lágrimas mojan la almohada, saladas, que mi corazón echa de menos su amor, amargo, y que mi mente se pregunta ¿dónde está? cuando los recuerdos atraviesan mi alma, y la llenan de fría nostalgia. En esos recuerdos aún continúa su sonrisa blanca de marfil, su aliento en mi cuello y sus brazos sin querer dejarme ir, su aroma inundando mi ropa, y aquél temblor, el miedo a lo que pasaría después, al adiós. Adiós. Esa sensación de inmenso vacío al haber perdido a quien te daba razones para levantarte en cada caída, a quien te daba motivos para sonreír y no sentirte sola. Me dejaste marcada, porque jamás, nadie, me hará sentir de ese modo, ese modo que sólo tú sabías, y hoy, te echo de menos.

sábado, 25 de agosto de 2012

For the world you are someone, but for someone you are the world.

Es simple, como cuando ves subir las burbujas en una copa de champán. Tan simple como que el destino se encarga de hacernos felices, y desdichados. Simple, se encarga de hacernos seguir nuestro propio camino. De vez en cuando ese camino toma desviaciones, cometes errores, tomas un sendero equivocado y acabas en lugares insospechados, así acabé yo formando parte de tu camino, por errores, traiciones, dolor y equivocaciones, pero, ¿sabes? No me arrepiento de ninguno de mis errores, porque todos y cada uno de ellos me condujeron hasta ti, hasta tu pelo, hasta tus labios, hasta tus ojos, tu sonrisa y todo tu amor. Y aún sigo pensando en "¿Qué nos pasó?" cuando leo tus frases, tus palabras de amor, cuando recuerdo las risas y las caladas de amor que echamos al aire. ¿Qué nos pasó? "La distancia", dirías tú. Pero, cielo, la distancia no son más que unos cuantos kilómetros sin importancia, que no deberían contar en esto. Porque, como siempre he pensado, la distancia no es el problema, es la excusa, el problema viene cuando uno de los dos, tú en este caso, se cansa de luchar, abandona, se rinde y huye. Te diré una cosa, podríamos haber llegado muchísimo más lejos, porque el amor te hace acortar distancias y une corazones separados por unos cuantos kilómetros. La distancia es, simplemente, una dificultad que pone el destino en aquél camino que es la unión de dos que andaban perdidos. No supiste luchar contra esa dificultad y superarla, no quisiste que fuéramos dos luchadores contra un bache en el sendero, preferiste tomar tu propio camino en solitario porque consideraste que era más fácil, y, quiero decirte que lo fácil no es la solución, porque si te empeñas en enfrentarte a los retos, la recompensa es mucho más satisfactoria. Seríamos felices juntos, esa es la recompensa que no has podido obtener.

domingo, 19 de agosto de 2012

Ich liebe dich.

"Te quiero". Una frase fuerte, con un significado contundente, especial, único. Una frase que esconde mil sentimientos detrás, llanto, sonrisas, abrazos, besos, alegrías, tristezas, discusiones, risas. Querer a alguien es probablemente uno de los sentimientos más bonitos y dolorosos que puedan existir. Cuando quieres a alguien, y tu amor es correspondido, puedes sentir que eres la persona más feliz del mundo, puedes sentirte fuerte, protegida, especial para alguien. Pero nada es duradero, ni siquiera el amor. Y, detrás de ese mundo de magia, y color, se esconde el dolor más terrible de todos; el de un corazón roto. Dicen que lo más difícil en este mundo es decir "te quiero" y "adiós", ambos van de la mano, al final de cada "te quiero" vendrá un "adiós", quizá con lágrimas en los ojos, quizá con miles de sentimientos reprimidos, quizá sincero, puro.
"Te quiero". Algo bonito, que puedes decir con sinceridad, que esconde detrás miles de millones de lágrimas perdidas. "Te quiero" y no hay más.

viernes, 20 de julio de 2012

Al final, el tiempo y la distancia pudieron con nosotros, pequeño.

Buenos días pequeño, hoy vuelvo a recordarte. Me gustaría que me dijeras que has soñado toda la noche conmigo, que me echas de menos, que respiras de nuestros recuerdos, de nuestras risas al aire, de las palabras que se perdieron con el viento. Hoy quiero decirte, pequeño, que no voy a encontrar nadie como tú. Nadie que me hable en italiano, nadie con quien discutir día y noche por lo guapa que soy, nadie con quien cada noche tenga tantas ganas de hablar, nadie que me llame "princesa", nadie que me abrace tan fuerte, nadie que esté tan loco como para quererme. No volveré a ser la primera de nadie, no volveré a besar con tanta pasión, nadie volverá a hacerme reír como tú lo hacías, nadie me va a gastar esas pequeñas bromas cada día, nadie me va a echar de menos desde el primer día que nos veamos, nadie me va a hacer prometerle que voy a ser feliz. Y, es simple, no voy a encontrar a nadie, porque no hay nadie como tú. Y es a ti a quien quiero, de verdad, a quien nunca dejaré de querer. Porque eres diferente, especial, mi señorito. Y, algo tengo muy claro, no volveré a ser la princesa de nadie, porque tú eres mi único príncipe. Soñaré todas las noches contigo, pequeño.

523999_3952714170594_1629556122_n_large

martes, 26 de junio de 2012

Quererte, simple, difícil

Esta noche, como muchas otras, paso los minutos con la vista fija en nuestra fotografía, casi sin pestañear. Nuestra canción suena de fondo, y mi mente vuela a ese momento, a las sonrisas, a los besos, a las palabras bonitas...a cuando eramos felices juntos. Ahora tú eres feliz, tan feliz, sin mi. Y sí, ya lo sé, que ella es mejor que yo en tantos aspectos...que es más guapa, que es más lista, que es más simpática, cariñosa, romántica, atrevida...más todo. Y, bueno, los trescientos noventa y cinco kilómetros que separan nuestras vidas no ayudan, claro, nunca han ayudado, pero yo he luchado por estar a su altura, por que siguiéramos como hasta ahora...vamos, piénsalo, no nos iba tan mal, tú eras quien cada noche buscaba la mínima excusa para hacerme sonreír, con un mínimo detalle conseguías hacerme feliz, ¿Dónde están esos abrazos? ¿Esos momentos? El cariño, la comprensión, la fuerza...se han ido, todo lo que teníamos se ha ido. Y, claro, te echo de menos.

sábado, 19 de mayo de 2012

Y con los primeros rayos empezará, otro duro día sin ti.

Es esa sensación, cuando escuchas una canción en un día lluvioso y de pronto una lágrima traviesa resbala por tu mejilla sin que puedas evitarlo, ¿Por qué? Es esa canción, esa melodía, esa letra, ese sonido...que cuando lo escuchas sólo viene un nombre a tu cabeza, él. ¿Qué tiene él que te hace perder tanto la razón? Que te hace volverte tan loca en ciertos momentos, perder la cordura, el sentido. ¿Qué tiene, que cada nota de alguna extraña canción de amor te recuerda a sus ojos, a sus labios, a su sonrisa? Es esa sensación, querer y no poder. Echar de menos cada segundo del día sus abrazos, sus besos. Echar de menos en todos y cada uno de tus sueños su forma de hacerte sonreír. "Hola preciosa", esa manera tan especial de hacerte sentir querida, importante. Y de pronto, ya no está, y tu cabeza no puede dejar de preguntarse por qué una mañana amaneciste y no estaba a tu lado, se marchó sin volver la vista atrás y sin pedir perdón. ¿Qué tienen sus recuerdos que todavía huelen a él? Y tirada en la cama cada día piensas cuál fue tu error, tu fallo, la razón de su huida. Y por más que, desesperadamente, intentas encontrarle un sentido a todo esto, vas perdiendo la razón segundo a segundo, con cada día que no pasa a tu lado, con cada recuerdo lejano de su voz, de sus "te quiero princesa", de todo lo que fuisteis, la magia y el amor. Y sabes que nunca, nadie, te hará sentir todo lo que hizo él, porque no hay nadie que se compare a él.

martes, 14 de febrero de 2012

La realidad, trozos de cristal, que al final hay que pasar descalzo.

Supongo que todos tenemos derecho a equivocarnos, y muchas veces intentamos cambiar y rectificar, pero tal vez no merezca la pena intentar enmendar los errores del pasado, tal vez no haya una solución para ellos, simplemente nos queda lamentarnos del daño que causamos a las personas que nos quisieron, tratar de olvidar, borrar las lágrimas de nuestro rostro y seguir caminando, sin mirar atrás, caminar con la cabeza bien alta y mirar siempre hacia delante, hacia ese futuro que nos aguarda impaciente, repleto de nuevas experiencias y emociones, que aún están por vivir.

Tumblr_lugqeim4kc1r60zhwo1_400_large

Let's be crazy.

Let's be crazy.